Algunas lesiones son la causa de que los animales pierdan la capacidad de orinar. Éste es un problema crítico, a veces letal, a menos que el cuidador sepa como lograr que el animal orine. Esto se denomina “exprimir” o “vaciar” la vejiga”
Tu veterinario te enseñará como hacer esto y es importante que sigas con cuidado y atención todas sus instrucciones. Si tu veterinario no quiere enseñarte, encuentra a otro que sí. Esta página es una explicación de cómo vaciar a un perro o a un gato y no pretende ser un substituto para los consejos de un profesional veterinario.
La vejiga de tu animal ha de vaciarse completamente al menos tres veces al día (cada 8 horas).Algunos animales lesionados sufren pérdidas de orina durante el día. Al exprimirles la vejiga se asegura que está completamente vacía para prevenir infecciones. También reducirá la cantidad de orina que empapa la piel y que puede provocar llagas.
Algunos animales heridos son incapaces de orinar aunque quieran. No orinan a no ser que la vejiga esté tan llena que rebose. El exprimir asegurará que la orina no se queda en la vejiga demasiado tiempo y no crea un caldo de cultivo para las bacterias e infecciones. También evitará que la vejiga pierda elasticidad al llenarse demasiado. Si la vejiga pierde elasticidad, puede que el animal nunca sea capaz de orinar normalmente incluso en el caso de que recupere la capacidad de controlar la vejiga. Tras una lesión de médula o de los cuartos traseros de un animal, la cistitis (infección) de la vejiga puede convertirse en un problema de salud importante. Una infección de vejiga puede provocar la muerte en pocos días si no se trata. El cuidado de la vejiga es esencial para la salud de tu animal, haya sido operado o no, y sea su discapacidad parcial o completa.
Estos son los signos más comunes de infección del tracto urinario.
